
Eres mujer.
Mujer de espejo y coqueterías
que enhebra con la mirada,
en el ojo de los tormentos
y los amores.
Estas penas mías.
Eres mujer.
Esa que deja la estampa
en el aire.
Que sacude las nostalgias
de los corazones bohemios
y taciturnos.
!Hay Mujer¡
Tu, si tu.
La misma que enreda mis ideas
en sus sueños de embrujos
y sortilegios.
Robándome los sueños.
A ti mujer,
que pisa mi sombra
y bebe mis palabras.
Quisiera robarte en un beso
la inocencia de la mirada.
Y las caricias de un te quiero.