Suena la cítara.
En el rincón,
la flauta anuncia su entrada.
El tambor resuena alegre y saltarín
Tocaron a marcha forzada.
Late un corazón que ama.
El violín sin quedarse atrás,
Llena la sala del pecho.
Los trompetines realizan el clarinar
de la marcha rápida al encuentro.
Entre la idea y la esperanza.
Amamos, estamos vivos.
Entonan los coros celestiales
los aleluyas eternos a la idea de amar.
El saxo alto hace gala con su rítmico
encanto, cuando acompaña al corazón.
Casi es perfecta la unión.
Caminan tomados de la mano.
Así cae el crepúsculo,
lento, eterno.
Silente a las palabras de los labios
Alegre y juguetón al juego de las manos.
Cuando nos tocamos en las pupilas.
Somos libres a las caricias de los sueños.
1 comentario:
hola buenos dias... descubri tu blog por accidente, tambien tengo un blog, se llama mi 1era vez, y hace poco, en compañia de dos amigos, creamos desmenuzadores, tu trabajo me parece muy muy bueno, desmenuzadores es un proyecto, y me encantaria que estuvieras ahi.. y participaras con tus poemas. quiza debas leer la dinamica. de cualquier forma.. estare por aqui.. leyendo su trabajo, felicidades
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