Toco tu alfombra de pétalos,
pétalos amarillos,
girasoles encarnados
de ideas y nostalgia.
Camino lento en tus recuerdos,
de esta noche, que es mi noche,
de placeres y deseos,
de plegarias y anhelos.
Agradecido de ti por lo que me brindas,
una vida a plenitud.
Por eso,
al ver cada amanecer:
Levanto mis plegarias,
a ti que lo eres todo en mi alma,
diciéndote en silencio,
a grandes voces
repitiendo como eco en mis oídos,
en eterna oración sublime.
Que suerte he tenido de verte,
conocerte y amarte,
en la inmensidad de tu amor.
Padre Mío.
1 comentario:
Hola Rafael, por aca me tienes visitando tu hermoso espacio...este poema me llamo la atención...tiene mi nombre en el...Bello pema...
Te dejo un fraternal abrazo desde el último lugar del mundo...
Eli.
(Girasoles)
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