Amor, dejé la puerta abierta. La llave donde la tiraste. Y los momentos siguen iguales. No los he tocado para nada. Tampoco borre tu sonrisa de tu cara color canela. Me hace compañía en la soledad. Amor, sigo visitando las cuatros paredes las nuestras. Ellas son parte de esta historia. Ya sabes, esas que no se pueden escribir. Amor, dejé la puerta abierta. La de mi corazón. La de mi alma y los suspiros. La misma que tú le pusiste colores. Una cosa más. El papel de esta idea llamada amor, No se estruja y espera por ti. Porque sabes que con las ganas a cuestas deambulo entre tus brazos. Buscándole a la noche clara y a la mañana eterna. La existencia de nuestro amor. El que empezó con las miradas, y sigue cómo río desbordado por tu alma y la mía. Con mis ganas acuestas marco los puntos en tu corazón. Unos más cortos otros más largos pero puntos de los dos. Cuando hacemos el amor. Una cosa más: Dejé la puerta abierta, espero por ti.
Deseo hacerte el amor lentamente con mis palabras. Donde el paragua de la lluvia de caricias sea tu piel. Y las fronteras de las pasiones: los deseos de nuestras carnes.
viernes, 15 de febrero de 2019
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